"Para proyectar una [evasión], lo primero es saber qué excluir" Italo Calvino, Tiempo Cero, p. 172
Primero, y a propósito de los mundos virtuales, debo comenzar admitiendo que la idea de las “realidades o mundos paralelos”, la idea de fantasear con vivir otra vida paralela, evadirse de la vida cotidiana y disfrutar de una segunda oportunidad para hacer las cosas de otra manera, no me terminan de convencer. Sin embargo éstas mismas premisas han sido los argumentos más potentes para uno de los grandes protagonistas de la Internet: Second Life.
Hace una semana, conversando con una docente acerca de la incorporación de nuevas tecnologías en la formación de los profesionales de la salud, me enteré del proyecto que tiene la U de Dundee en Escocia: la creación de un hospital virtual que permita a los estudiantes desarrollar habilidades - mediante el entrenamiento virtual - de contacto y relación con los potenciales usuarios/ pacientes; un Second life “educativo”
Me impresionó la experiencia y decidí buscar y leer toda la información que tuviera relación con el tema. Esto que comparto, es parte de lo que descubrí: encontré una isla de la salud - virtual.
No se trataba del proyecto escocés, sino de un proyecto español iniciado en el año 2008 por la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (semFYC) y la Coalición de Ciudadanos con Enfermedades Crónicas. Un entorno virtual SEcond Life que se ha convertido en un espacio no sólo para profesionales sino también para la población. Se trata de un espacio mediático que facilita una relación más eficaz y constructiva entre médicos y pacientes.
Las personas que visiten la isla pueden encontrar desde tours informativos sobre hábitos saludables hasta la posibilidad de consultas gratuitas y recomendaciones de medicina preventiva orientadas, especialmente a los adolescentes.
Después de visitar la isla, me hace sentido la frase que inicia el prólogo del libro "Second Life. Invéntense una vida digital y conviva con ella" (Alfaomega, 2008), frase que inicia éste posteo.
Los invito a recorrer la isla, a través del siguiente enlace, isla de la salud.
Primero, y a propósito de los mundos virtuales, debo comenzar admitiendo que la idea de las “realidades o mundos paralelos”, la idea de fantasear con vivir otra vida paralela, evadirse de la vida cotidiana y disfrutar de una segunda oportunidad para hacer las cosas de otra manera, no me terminan de convencer. Sin embargo éstas mismas premisas han sido los argumentos más potentes para uno de los grandes protagonistas de la Internet: Second Life.
Hace una semana, conversando con una docente acerca de la incorporación de nuevas tecnologías en la formación de los profesionales de la salud, me enteré del proyecto que tiene la U de Dundee en Escocia: la creación de un hospital virtual que permita a los estudiantes desarrollar habilidades - mediante el entrenamiento virtual - de contacto y relación con los potenciales usuarios/ pacientes; un Second life “educativo”
Me impresionó la experiencia y decidí buscar y leer toda la información que tuviera relación con el tema. Esto que comparto, es parte de lo que descubrí: encontré una isla de la salud - virtual.
No se trataba del proyecto escocés, sino de un proyecto español iniciado en el año 2008 por la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (semFYC) y la Coalición de Ciudadanos con Enfermedades Crónicas. Un entorno virtual SEcond Life que se ha convertido en un espacio no sólo para profesionales sino también para la población. Se trata de un espacio mediático que facilita una relación más eficaz y constructiva entre médicos y pacientes.
Las personas que visiten la isla pueden encontrar desde tours informativos sobre hábitos saludables hasta la posibilidad de consultas gratuitas y recomendaciones de medicina preventiva orientadas, especialmente a los adolescentes.
Después de visitar la isla, me hace sentido la frase que inicia el prólogo del libro "Second Life. Invéntense una vida digital y conviva con ella" (Alfaomega, 2008), frase que inicia éste posteo.
Los invito a recorrer la isla, a través del siguiente enlace, isla de la salud.
Buen viaje.
Sandra
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